Illescas y El Greco

Reconozco sin ningún pudor que cuanto más viajamos y más lugares visitamos, descubrimos otros tantos de nuevos igual o más interesantes que el anterior.

Illescas es el perfecto ejemplo de lo que os digo. Como la tenemos a tiro de piedra de donde reside mi pareja pues no le prestábamos la atención que realmente se merece una pequeña ciudad como ésta, con grandes raíces históricas.

Situada justo a medio camino entre Madrid y Toledo (35 kms.) destacan en Illescas, entre otros, el yacimiento celtíbero del Cerrón y restos de la Reconquista como la Puerta de Ugena de Alfonso VI, la única que queda en pie de las cinco que hubo en su momento formando parte de la muralla que protegía la ciudad de posibles invasores. Está realizada en estilo mudéjar con mampostería y lladrillo. La encontraremos en la actual calle Greco y está datada en el S.XII.

De época posterior son ya la iglesia de la Asunción, del S.XIII, de la que destaca en especial su gran torre mudéjar de seis cuerpos y el más destacado Hospital-Santuario de La Caridad, de los S.XV y XVI, en el que se conservan cinco obras maestras de El Greco, las cuales el pintor realizó hacia 1603 como parte del proyecto de decoración del santuario, conseguido por mediación de su hijo.

En su interior podemos encontrar, aunque no están accesibles al público libremente como es lógico, las cuatro obras del pintor que son: La Anunciación, La Virgen de la Caridad, La Coronación y La Natividad. Existe aun una quinta pintura, San Ildefonso, la cual se cree que no se engloba en el proyecto de 1603 si no que pertenece a una época algo anterior.

La verdad es que está prohibido hacer fotos en el interior del recinto. Esta que podeis ver es la única imagen que conseguimos sacar con el móvil camuflado y sin flash.

Aquí podeis contemplar los cinco cuadros mucho mejor (imágenes sacadas de Wikipedia)

Ni que decir la importancia histórica de estas obras de arte, las cuales cobran aun más relevancia al haberse declarado 2014 como el Año Greco.

De vuelta al exterior, algo que nos llamó poderosamente la atención en uno de los laterales de la nave fue una enorme puerta de dos hojas, realizada en madera y actualmente ya muy envejecida por el tiempo. Aun así, no deja de impresionar en especial por su altura.

Si aun tenemos ganas de más, podemos perdernos por el bello casco histórico de la ciudad, donde destaca la calle Real, antiguo camino entre Madrid y Toledo donde aun podemos contemplar una casa-palacio del S.XVIII, la Plaza de los Infanzones, la Plaza Mayor o el convento de la Concepción Madre de Dios.

Como veis, una pequeña ciudad con gran riqueza cultural.